





Las llamadas fraudulentas son una realidad y un grave problema en la sociedad actual. En España se han incrementado en los últimos años, al igual que México, donde este tipo de acciones fraudulentas se dirigen mayoritariamente a las personas de tercera edad, cuya vulnerabilidad se traduce en “dinero fácil” para los delincuentes. Una adecuada legislación reduciría considerablemente el número de estafas, sin embargo, la tecnología avanza y las técnicas empleadas por los estafadores son cada vez más sofisticadas. Por ello, es necesario contar con la protección tellows, tanto en teléfonos móviles como en líneas fijas.



